Osea no mamen! Estaba yo muy agusto estudiando para un examen (quién sabe para cuál, hay muchos estos días) con Marcela en el segundo piso de la biblio y llegó uno de los achichincles del doctor Herrera a corrernos.
El segundo piso de la biblio se empezó a construir este semestre, haciendo un ruido de la chingada por dos meses de clases cuando bien se pudo construir en vacaciones. Como buenos mexicanos, lo inauguraron antes de terminarlo con la visita del rector y toda la cosa. Hace unos días ya subieron mesas. Hay unos cubículos muy chichos que yo supongo que son para estudiar y como un día vi a unos de psicología estudiando ahí pues este día yo también quise.
Poca madre estudiar en los cubículos, viendo a la gente desde arriba.
Pues que llega el tipo este:
Tipo: Miau! Jóvenes, dice el doctor Herrera que todavía no pueden estar aquí.
Marcela: Y hasta cuando?
Tipo (lamiéndose la pata): Pues hasta que lo inauguren. Miau!
Nino: Pero no estaba ya inaugurado?
Tipo: Pues hasta que lo terminen.
Pos ya recogimos nuestras cosas y nos fuimos. Pero al bajar las escaleras venía otro felino hacia nosotros con una cinta de “precaución” en la pata.
Felino II: Miau! Jóvenes, no pueden estar aquí.
Nino: Ya nos dijeron, gracias.
Pues con la habilidad que tienen esas razas tan ágiles acordonó la escalera para que nadie subiera más.
Sí, se emocionó.
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